El centro histórico de Praga es de esos lugares en los que se puede pasar el día caminando, investigando pequeños pasajes y comiendo al paso. Cada calle ofrece una perspectiva distinta de la ciudad. Y bueno, si te pilla la hora del atardecer en el Puente Carlos es un espectáculo que nunca más podrás olvidar.
Praga, República Checa
30 de enero del 2018