Era cierto lo que decían los libros. El atardecer en el río Mekong es un espectáculo inolvidable: El silencio, el agua tranquila, las barcas, las montañas selváticas y el cielo encendido en colores anaranjados. Es una maravilla para quienes disfrutamos de sacar fotografías. Eso sí, no debes olvidar el repelente de mosquitos.
Luang Prabang, Laos
5 de febrero del 2014