Vivir cerca del mar es un privilegio. No importa que no lo visites a menudo. Cuando necesitas un espacio para tomar aire o simplemente extraviar tu mirada en el horizonte, siempre está ahí. Como en esta fotografía tomada después de un día de lluvia, a un par de cuadras de mi trabajo y antes de iniciar la jornada laboral.
24 de agosto del 2012
Valparaíso, Región de Valparaíso, Chile